Terminó el impulso alcista en Tubacex y lo peor es que se ha producido con evidentes síntomas de distribución pues Koncorde señalaba ventas de las manos fuertes mientras que los pequeños inversores incrementaban las compras al calor de la subida.
Ahora el aspecto se torna complicado, debe ir a cerrar el hueco en 2,74 euros incluso acercarse a los 2,62 donde tiene el primer soporte fiable. A medio plazo el aspecto es de continuidad bajista y raro será que no le veamos en los entornos de 2,30 euros.