La crisis de Chipre parece haber pasado factura a los índices, pero no tanto para alterar la tendencia primaria. A la hora de escribir este post, todavía no hay solución en firme, si es que esta es posible, pero parecen haberse olvidado las consecuencias en el cortísimo plazo. Los mercados americanos han terminado arriba, para ellos los problemas de la vieja Europa son un acicate, no es que estén mejor que los demás, pero siguen dentro de su burbuja hasta que explote. No hay mucho que añadir a los comentarios que vengo realizando todas las semanas, cada vez les queda menos margen, pero les queda.
En la vieja Europa, índices en resistencia que han aliviado levemente, pero todavía no ha llegado el momento de las caídas. Se nota el agotamiento de la tendencia, no fluye capital con intenciones de quedarse a plazos más largos que el corto, aunque la fortaleza en la tendencia primaria mantiene las posiciones en situación de hacer nuevos máximos, al menos en el DAX alemán.
Eurostoxx50 e Ibex parecen haber hecho un techo, tenemos crestas decrecientes y aunque los soportes actuales aguanten, será difícil ver superar los últimos máximos. Los gráficos piden más recortes, el lunes será crucial para su continuación.
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